SEGÚN RAJOY. ¿PARA QUÉ ESTÁ LA OPOSICIÓN?

La respuesta que a uno se le ocurre es una perogrullada: “la Oposición está para oponerse”… Pero, en la realidad parlamentaria, la Oposición no está para oponerse, pese a que Rajoy habla con frecuencia de que “Voy al Parlamento a hacer oposición”, sino para hacer propuestas alternativas a las hechas por el Gobierno, para hacer sugerencia útiles al Gobierno y a España, para pedir explicaciones clarificadoras a las que hace el Gobierno, para explicar los “porqués” del gobierno. La función de la Oposición es la de colaborar a que el Gobierno gobierne bien, no es para ser la fuerza de choque “contra el Gobierno”.

Una buena Oposición parlamentaria es el mejor apoyo que pueda tener un Gobierno, especialmente por las posibles sugerencias, preguntas y clarificaciones de la Oposición, porque, la Oposición no es “la contra”, sino la mejor ayuda que puede tener un Gobierno para llevar a cabo su labor, es decir, la labor de gobernar.

Por esto, se queda estupefacto el lector de periódico, cuando lee un titular como el de “el País” de hoy, jueves 19 de Noviembre del 2009 (pag.14) que dice así: ”Rajoy se lanza a pedir el cese de tres ministros sin esperar las explicaciones”. Por lo que nada tiene de extraño que De la Vega pida comparecer y que acuse al PP de ponerse del lado de los piratas.
Todo esto nos sirve para decir que, para esto, no esta la Oposición en el Parlamento, sino para hacer las propuestas alternativas que ayuden a solucionar el problema. Porque, la Oposición Parlamentaria, no está para obstruir el buen funcionamiento del Parlamento, sino para ayudar que el Gobierno lo haga rectamente y bien.

No son pocos los políticos que aún no han descubierto lo que hay que hacer y no lo contrario. Y ¿qué hay que hace? Primero percatarse de que una persona está en el Parlamento para bien y no para daño de la Institución parlamentaria y, sobre todo para colaborar por luchar por bien de España. Rajoy, pues, no es el ejemplo a seguir, como, creo que tampoco lo es en su comportamiento con Camsps y la corrupción. ¿Vale? ¡Pues nada más! Ni menos.

23 noviembre 2009