EL NÚMERO EN LA POLÍTICA

Es evidente que el número de personas de un grupo parlamentario puede inclinar la política en una o en otra dirección y, esto, a distintos niveles. Y que puede ir la política, a veces y quizás, por senderos arbitrarios. Pensemos, por ejemplo, en Valencia y en si, Camps, es o no aceptado por el propio Partido Popular a nivel nacional. En este asunto, Rajoy, es un gran especialista en la expresión de la duda, el silencio o en dar respuestas desconcertantes
Hay, sin duda, un problema de número en los apoyos parlamentarios, y más, según del Partido o de la Comunidad Autónoma de que se trate. Porque, el Sr. Rajoy, es especialista en dar respuestas ambiguas o responder con silencios. A este respecto, recordemos que Camps está en la cuerda floja de la política y que no sería extraño que cayera en desgracia en el momento más inesperado.
Recordemos a su vez, que Madrid también tiene problemas de credibilidad en las investigaciones actuales y que se duda de la credibilidad en las investigaciones a Dña Esperanza Aguirre y que pudiera no tardando estar en la cuerda floja…
Digamos que, en muchos de estos casos, el Sr. Rajoy da “la callada por respuesta”, pese a que intente apretar los tornillos a Sr. Zapatero y que se ve que, si pudiera, lo desbancaría del lugar que ocupa y ocuparía su puesto. Aún no lo ha conseguido y puede que, al paso que va, nunca jamás lo ocupe.
Y, mientras tanto, Rajoy se hace el ignorante y no se atreve a dar un paso adelante para desbancar al Señor Rodríguez Zapatero. Recordemos que, hace unos días, no lo consiguió en el Congreso de los Diputados por un voto. Pero Rajoy no ha dicho una sola palabra. Es raro que manifieste de forma tan estruendosa su inaudible silencio. Pero él, el señor Rajoy, sabe que está agazapado a la espera. ¿No parece que es así? Es un silencio estruendoso. Y se descubre como un asomo de hipocresía.
¿Y usted qué piensa?...Yo también.

10 de junio 2010-06-10