SERENA Y CERTERA REPRIMENDA DE PECES BARBA

Me ha parecido un acierto, propio de un catedrático universitario de Derecho, la amplia y respetuosa reprimenda dirigida a diversas personas del arco político, sin hacer excepción de personajes, incluido el Presidente del Gobierno y, también comprendido de modo, aunque seriamente respetuoso, especialmente severo, el grupo parlamentario del PP, al que, no obstante, también alaba por el hecho de haber colaborado en la existencia, en el País Vasco del Gobierno constitucionalista de Patxi López.

Al Presidente Zapatero le critica, no sin razón, el haber preferido, en los nombramientos, la juventud a la experiencia, actitud que ha propiciado algunos serios errores, de los que la sociedad no puede estar plenamente satisfecha. Lo ha expresado el Doctor Peces Barba con sencillez y con plena sinceridad. Lo que indica que no se para en barras y “caiga quien caiga”. Hay que reconocer, no obstante, la sinceridad

y nobleza del Profesor citado.

Pero, la crítica más contundente y más fuerte, ha sido dirigida por Peces Barba hacia el PP, de quien dice que “es insólita su huida hacia delante lanzando improperios y acusaciones gravísimas e infundadas, porque no aparece intención de probarlas ni de presentar pruebas que las fundamenten”. Terrible me ha parecido la acusación del Profesor y, lo que es peor, certeras.

Porque es lanzar al aire calumnias, de las que no se ve el fundamento, ni siquiera el deseo de presentarlo. La utilización de la calumnia en política es ponzoñosa porque intenta hacer creer que existe lo que no existe y se tilda a quien se acusa, de una falsedad.

Ciertamente, hay que reconocer, el deseo de verdad que anida en el corazón y en la mente del Profesor Peces Barba y que desea que exista en la Sociedad española, en todos los Partidos y ámbitos políticos. Me ha parecido que, el Profesor, desea que en la Sociedad se vaya con la verdad por delante y que la utilización del engaño y la mentira sean repudiados por una sociedad que, por encima de todo, debe ser éticamente limpia. Y que la ética política sea lo normal en una sociedad que quiere ser justa. ¡Gracias al Profesor Peces Barba! Eso es lo que considero oportuno. ¡Gracias!

24 Septiembre 2009